top of page

Parejas gay

Hace unos pocos meses el papa Jorge Bergoglio fue interrogado sobre su parecer ante las parejas homosexuales. Él respondió con una pregunta: “¿Quién soy yo para juzgar”? Su respuesta fue evasiva y más política que religiosa porque hizo a un lado las Santas Escrituras.

¿Desconoce Bergoglio lo que dice la Palabra de Dios? Porque es muy claro que las Santas Escrituras nos dicen que los santos, es decir los cristianos, hemos de juzgar al mundo (en la consumación de todas las cosas). Y si vamos a juzgar al mundo, estamos facultados para juzgar cosas como la inmoralidad sexual (1ª Co. 6:2-3). Es verdad que nuestro Señor Jesucristo en Mt. 7:1 nos advierte sobre el cuidado que debemos tener al juzgar a los demás; sin embargo, ¿está diciendo el Señor que uno como cristiano debe procurar no ver ni oír los yerros de los demás, volvernos ciegos a sus faltas (fingiendo que no nos damos cuenta de ellas), a rehuir toda crítica y rehusar discernir entre la verdad y el error, lo bueno y lo malo? Creo que no.

Así que no es un delito, ni una falta de amor, ni discriminación sentar nuestra posición como cristianos frente a una desviación de la conducta humana como lo es el homosexualismo. Y podemos darle varios nombres a este tipo de aberración social. Desde el punto de vista teológico la llamamos pecado, porque en esencia pecado es “errar el blanco”, es desviar el curso de lo recto. Desde el punto de vista médico, es una enfermedad. Desde el punto de vista psicológico es una confusión en la identidad de género, etc. Y podemos seguir añadiendo definiciones sobre el asunto, aunque es claro que para la comunidad gay es una virtud, no reconociendo que tal virtud ya pasó a la historia como conducta social inaceptable.

En el año 53-54 a. C., la ciudad de Corinto en Grecia era una ciudad grecorromana regida por una cultura pagana. Fue conocida como un centro de corrupción e inmoralidad, por su culto a la diosa Afrodita o Venus, lo cual a su vez fomentó la prostitución “sagrada”. Sabemos, además, que en las ciudades grecorromanas el homosexualismo era una práctica normal, socialmente aceptada. Pues bien, el apóstol Pablo llegó a esta ciudad e irrumpió con el mensaje del Evangelio, el cual presentaba valores muy superiores a los conocidos hasta el momento. Allí floreció una iglesia que poco a poco fue recibiendo en su seno a muchos hombres y mujeres que huían hastiados de una sociedad corrupta. Llegaron, por lo tanto, homosexuales que al oír el mensaje del Evangelio encontraron una vida nueva y más feliz que la que anteriormente habían llevado. Muchos homosexuales dejaron sus aberraciones y comenzaron a vivir una vida diferente al ser alcanzados por la gracia de Dios. Más tarde, Pablo escribiendo su 1ª carta a los Corintios les dijo:

“9 ¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No erréis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones,10 ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, heredarán el reino de Dios.11 Y esto erais algunos; mas ya habéis sido lavados, ya habéis sido santificados, ya habéis sido justificados en el nombre del Señor Jesús, y por el Espíritu de nuestro Dios”. (1ª Co. 6:9-11)

Pablo reconoció que algunos habían sido liberados de su tendencia homosexual gracias al lavamiento, santificación y justificación operados por la gracia de Dios cuando ellos creyeron en el Señor Jesucristo como su salvador.

Si usted que lee estos párrafos es un gay, pues sepa que no tiene por qué resignarse a pensar que tiene que acostumbrarse a un estilo de vida así. No, Cristo nuestro Señor ha venido a rescatarnos de un estilo de vida vano. Ha venido a darnos vida nueva. Así que, usted puede por la gracia de Dios llegar a ser una persona totalmente nueva. ¿Por qué no lo intenta?

Orosmán Rozo.

Pastor Iglesia Bautista del Norte Bogotá, Colombia. A. S.

Entradas destacadas
Entradas recientes
Archivo
Buscar por tags
Síguenos
  • Facebook Basic Square
  • Twitter Basic Square
  • Google+ Basic Square
bottom of page